El Susurro del Mar

Fui criado con canciones del mar susurradas por mi padre vikingo y los jeroglíficos de mi madre egipcia—donde cada símbolo no era solo un diseño, sino una oración hacia lo profundo. Recuerdo la primera vez que vi los símbolos Scatter brillar como plancton bioluminiscente en aguas nocturnas: no era azar, era el océano eligiendo a quien osa sumergirse. Entendí entonces: esto no es juego. Es narrativa con apuestas. En Ocean Wealth, no perseguimos jackpots. Navegamos hacia ellos. Los Wilds no son cartas locas: son los dedos de Poseidón reescribiendo el destino. ¿Rondas gratis? Son barcos fantasmas convocados por rituales antiguos, que aparecen cuando la marea recuerda tu nombre.